domingo, 25 de octubre de 2009
martes, 6 de octubre de 2009
75
Está decidido. Me puede el tedio.
De un tiempo a esta parte a penas fotografío. De una obligación para el alma se ha convertido casi en una afición que aparco.
No hay que ser un genio, todo lo que uno hace en material de producción artística, al menos por gusto, lo hace acorde a su estado anímico.
Yo, simple y llanamente, no puedo más. He descolgado todas mis fotos del corcho, ahora me mira desnudo, sin importarle que le haya privado de su ropaje, de su protección.
No sé si he tocado fondo o es que no me apetece. He pensado tantas veces en dejarlo, que ya es el summum, vuelvo una y otra vez, obligándome. Es un poco pesado, un poco cargante.
Todo me devuelve a los recuerdos. Mi tesoro es mi memoria creía, tonto de mí.
Que os vaya bonito.
Etiquetas:
caos,
escritos,
estupidez,
fotografía,
idas de pinza
Suscribirse a:
Entradas (Atom)