lunes, 29 de noviembre de 2010

no le rezo, ni le hablo, ni le doy, ni le pido

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Experimentos con largas exposiciones y linternas

se golpea porque daña y se oculta porque daña si se deja de ocultar...

martes, 23 de noviembre de 2010

"Mata a quien te dificulte el paso, es mi consejo"

viernes, 19 de noviembre de 2010

Cine, un nuevo ataque frontal por desalmados

Es la primera vez que voy a hablar sobre una de mis pequeñas aficiones en este blog... y hoy lo hago por un tema realmente dantesco. Mi pequeña afición es, en este caso, el cine.

Quizás ésta sea ya la crítica veinte millones que se hace sobre el tema, pero como dijo Clint Eastwood (no he cogido un gran filósofo, pero viene que ni pintado al "topic"), "las opiniones son como los culos, todos tenemos uno".

De un tiempo a esta parte, el cine, se ha hecho muchísimo más accesible. Esto, como todo, tiene cosas buenas y cosas malas. Lo bueno es obvio, el poder disfrutar con menos restricciones de algo tan apasionante como el cine es algo formidable. Lo malo, es lo que nos puede hacer vomitar y es la eterna comercialización de todas y cada una de las películas; es decir, el hacer películas malas, con argumentos absurdos, sin gastar un duro en guión e invirtiendo decenas o cientos de millones de euros en efectos especiales, sangre y tíos y tías buenas sin demasiado buenas aptitudes para interpretar.

Con cuatro salvedades, a veces, aunque uno lo intente, es imposible ir a ver una buena película al cine. Hay que buscarse las mañas como antaño para conseguir ir a una sala a ver algo no comercial de estreno. En general, estoy cansado de tener que ir a cineforums, clubs de cine y pases eternos de películas. No soporto ver 2 o 3 películas del tirón, me cansa y me supone un esfuerzo inconmensurable el hecho de tener que prestarle atención a todas ellas. Pero en fin, no sigo con esto que al final me voy de tema y no es plan, que esto es harina de otro costal.

Bajo estas consideraciones, la aberración con la que hoy me he topado es de magnitudes inverosímiles. Jon Favreau, director de "cine" como ya digo, ha sido el artífice y ejecutor de títulos como "Zathura" y "Iron Man" 1 y 2... se ve que no tuvo suficiente con la primera. Bien, pues hoy me encuentro con que este hombre amenaza a la humanidad entera con que va a publicar una película bajo el título "Cowboys & Aliens" que no es otra cosa que un Western en el que hay, efectivamente, alienígenas. La sandez, como podéis comprobar, es mayúscula.

El cartel en cuestión, para que veáis que no faroleo.

Jon Favreau es, ha sido y será un payaso integral, que vive por y para sacar dinero de la colosal masa extraviada de necios adictos a las artes marciales, los disparos y la charcutería desmedida, en películas de acción. Este cretino es la muestra de que, con dinero, uno puede hacer lo que le de la gana sin esforzarse mucho. Todas sus películas no son otra cosa que adaptaciones de algo. "Zathura", es una adaptación al estilo de "Jumanji", sobre un libro ilustrado de la mano de Chris Van Allsburg (del que, por cierto, sólo me llamó la atención "Polar Express"). "Iron Man", por su parte, es otra adaptación del famoso cómic de Stan Lee, pese a ser Iron Man uno de los peores personajes de toda la factoría Marvel. Es pues, también "Cowboys & Aliens" una adaptación del cómic homónimo de Scott Rosenberg. Este tío tiene el mismo criterio para hacer películas, que para leer cómics: ninguno.

Son copartícipes de esta ignominia, Daniel Craig (el peor James Bond de la historia), Harrison Ford (el pésimo Han Solo y el ya fondón Indiana Jones, pero al que le guardo cierto cariño por Blade Runner, Testigo Único o Lo que la verdad esconde(ojo, aquí sólo hablo de la interpretación de Harrison Ford)) y, finalmente, cabe destacar a Olivia Wilde, que le debe TODO lo que es a sus genes.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Y, sin embargo, recuerda –lo dice la Baghavad Gita– que lo que existe no puede dejar de existir ni lo que no existe puede llegar a existir .

viernes, 12 de noviembre de 2010

este es tu mundo absurdo, yo sólo vivo en él

miércoles, 3 de noviembre de 2010


25 de diciembre de 2009

Uno de esos putos días negros de mierda cuando nada es agradable y todo lo que sucede es una excusa para la ira. Un outlet para las emociones almacenadas, un arsenal, una armadura. Estos son los días en los que odio el mundo, odio a los ricos, odio a los felices, odio a los que se conforman, odio a los que ven la televisión, a los bebedores de cerveza, a los más satisfechos. Porque yo sé que puedo ser un poco de todas esas cosas odiosas y entonces odiarme a mí mismo por hacer lo mismo. No hay ninguna prevención, directiva o enfoque seguro para vivir.

Cada uno de nosotros conocemos nuestro propio destino. Sabemos por nuestros jóvenes cómo vamos a ser tratados, como nos recibirán, cómo acabaremos.Estas cosas no cambian. Puedes cambiar tu ropa, cambiar tu corte de pelo, tus amigos, ciudades, continentes, pero tarde o temprano tu propio yo siempre te coge. Siempre te espera en las alas. Las ideas se arremolinan, pero no se pegan. Aparecen, pero luego se van, como la lluvia de un parabrisas. Uno de esos días lluviosos, un coche explota en mi cabeza, el ambiente de este coche es un espejo de mi cráneo.

Mojado, húmedo, goteos y ventanas empañadas por el frío. Paredes de color gris. Nada bueno en la radio. Ni un pensamiento en mi cabeza.


Lo mismo que hace dos entradas.

lunes, 1 de noviembre de 2010

shut up and drive