martes, 6 de octubre de 2009

75




Está decidido. Me puede el tedio.

De un tiempo a esta parte a penas fotografío. De una obligación para el alma se ha convertido casi en una afición que aparco.

No hay que ser un genio, todo lo que uno hace en material de producción artística, al menos por gusto, lo hace acorde a su estado anímico.

Yo, simple y llanamente, no puedo más. He descolgado todas mis fotos del corcho, ahora me mira desnudo, sin importarle que le haya privado de su ropaje, de su protección.

No sé si he tocado fondo o es que no me apetece. He pensado tantas veces en dejarlo, que ya es el summum, vuelvo una y otra vez, obligándome. Es un poco pesado, un poco cargante.

Todo me devuelve a los recuerdos. Mi tesoro es mi memoria creía, tonto de mí.

Que os vaya bonito.

3 comentarios:

  1. La que conoce realmente la receta es Carolina yo como mucho puedo improvisar, aunque a la francesa... me saldrían crêppes. Hazme caso, tortitas, crêppes, arco iris... todos saben mejor sin lágrimas ;)

    En cuanto a la memoria, es un arma de doble filo, lo que no significa que nos tenga que amargar la existencia. No dejes de hacer fotos anda y viste al corcho que pronto llegará el frío.


    http://www.juguetesmimarte.com.ar/imagenes/detalle-arcoiris.jpg

    ResponderEliminar
  2. Ya te dije una vez que si yo fuera tú no lo dejaría, pero como no soy tú es elección tuya.

    Busca algo que te motive a llenar ese corcho. Yo lo único que te puedo ofredecer es una hora y sitio para sacar a pasear los objetivos ;)

    ResponderEliminar
  3. Me gustaría pero no he tenido la suerte de probarlos, además no sé si me saldrían como a ella porque nunca he llorado bonito ni con azúcar. Ella llora dulce porque tiene ojitos de almendra :)

    ResponderEliminar